junio 29, 2009

Le syndrome d'Amélie Poulain

"Cuando un dedo señala al cielo, el tonto mira el dedo."

El problema está en que no sé si tengo miedo, y, si lo tengo, de qué. Mis huesos no son de cristal, como los del señor Dufayel. No corro el riesgo de romperme al lanzarme a una piscina sin comprobar si hay agua primero. El caso es que no me considero una cobarde.

Necesito un señor Dufayel en mi vida que me diga que mueva el culo y vaya a por lo que quiero.

Fase REM #3

Sé que he soñado contigo. Por suerte, o por desgracia, no recuerdo de qué se trataba.

junio 28, 2009

Fase REM #2

No sé dónde estábamos, aunque sé que desde algún lugar percibía el mar, y que esperaba a un metro que nunca llegaba. Creo. Sé que al menos estaba en una estación de metro.
En el dichoso sueño, vas, y, de repente, me besas, y se me ponen rojas las mejillas y los labios. Escondo una sonrisa arrastrándome a unas sombras. Y me enfado contigo porque no sé por qué lo has hecho. Pareces disgustado por mi reacción.

Y entonces salto a otro sueño que no recuerdo.

junio 23, 2009

Suerte no, gracias.

Dicen que la suerte hay que construírsela. Que hay que hacer méritos y esforzarse para obtener lo que esperamos de ella. También hay quien dice que la suerte es algo incontrolable, algo aleatorio, algo imperceptible e intangible que favorece a alguien en algún momento dado. Así, por las buenas.


Una bruja me leyó las líneas de la mano. Me dijo que la suerte escaseaba en mi vida, y parece que tiene razón. La construcción de mi suerte por lo visto no es sólida, y el azar no ha decidido agraciarme con cosas buenas.


O igual es el karma. El cosmos es proxeneta de destinos, y yo he debido de ser una persona terrible en otra vida.

junio 22, 2009

El mapa de tus lunares vuelve a llevarme a la cuneta. Creo que lo que pasa es que no sé leerlo. Si supiera, encontraría las indicaciones para salir de tus ojos. O igual no hay salida. O no quiero salir.

junio 19, 2009

¿Tregua, por favor?

Cómo es posible que llueva tanto. Días, y días, y días. No entiendo por qué no para. Me llega el agua al cuello, y juraría que yo sabía nadar. Tampoco sé cuándo lo olvidé. Pst.

La vida no conoce la palabra 'tregua'.
Le suena extraña y ambigüa. A la vida nunca le dieron clases de vocabulario y semántica. Por eso somos nosotros los que nos tenemos que pelear por manejar los hilos. Y qué díficil es, maldita sea. No sé qué coño hacer con mis hilos. No hago más que enredarme con ellos con más bien poca gracilidad. Y, encima, me caigo. Y no llevo botiquín para curarme las heridas despellejadas de las rodillas y las manos. Eso te pasa por lista, me digo; eso te pasa por idiota y por ser siempre tan precipitada. Vas y la cagas.
Una y otra vez.


Una y otra vez.

junio 18, 2009

Fase REM #1

He soñado que perdía el autobús, y que, mientras buscaba una alternativa, me mandabas un mensaje sobre tu insomnio y después te declarabas con una canción.

Por suerte, los sueños son solo eso, sueños. Tonterías que dice el subconsciente, que en realidad no sabe ni por dónde le da el aire.

Y hasta donde yo sé, no eres preso reincidente en mi vida.

junio 17, 2009

Esta vez no puedes alcanzarme. Ni siquiera te das cuenta de que me alejo cada día un poco más.

Aunque me pregunto, otra vez, si me seguirías de saberlo.

junio 16, 2009

Despacito, despacito, y con pies de plomo. Si no me ahogo en el mar, podré tropezar con los mismos errores.