julio 16, 2009

Igual piensas que tenemos que buscarte. Igual crees que tenemos que esperarte. Esperar a que despiertes, esperar a que recobres el maldito sentido común, esperar a que te des cuenta de que estás haciendo daño a tu alrededor. ¿Te das cuenta de que si sigues esperando puede que el daño sea irreversible? No me queda paciencia esta vez, ya te dí demasiada. Te he dado tanta paciencia y te he buscado tantas veces cuando a mi no me has dado nada más que palabras medio llenas y a menudo carentes de sentido. Porque no las sentía(mos). Pero espero que esa persona llene tus días, o que al menos lo intente, porque ya estamos cansados de soplar contra tu vendaval.

Lo peor de marcharse es que nadie te busque. Lo peor de que te busquen es que sea para lamer sus heridas (cuando las tuyas siguen abiertas de par en par). Así que, como no quiero que me busques, agarro mi fular rojo y me largo.

4 polaridades:

marta dijo...

Y así, ataviada con su fular, se marcha para cerrar sus heridas, para obtener de nuevo la paciencia que ya cree perdida y derrocharla en alguien que sí la merezca.
Un beso MUYGRANDE :)

Culpable dijo...

Mi niña del fular rojo, eres mas fuerte de lo que crees y tus huesos no han de romperse por esto, aunque si tu corazón.
Lo repararás y llegarán personas que no se alejen y se queden a tu lado.
Mientras eso pasa, te mando un abrazo y tiritas para esas heridas.

Anónimo dijo...

¿Literatura o realidad? Muy duro, pero creo que muy bueno, las cosas claras y todo el mundo en su sitio.

Un beso.

Djuna dijo...

que un montón de paréntesis y puntos suspensivos atraviesen la sangre en un desorden que se abandona a si mismo.

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